Lo de revivir un mito es algo que a ninguna marca parece resistírsele y para Citroën, reinterpretar el Mehari era una tarea pendiente. Así que usando un C4 Cactus como base, han creado un práctico y veraniego descapotable con un innegable carácter lúdico.
Una de las características del original era la ausencia de techo y arcos, algo a lo que se han acercado lo más posible eliminando completamente la parte superior y colocando únicamente dos arcos de seguridad bien diferenciados del resto de la carrocería. Otra, que solo contaba con 2 puertas, cosa que también han respetado.
Además para enfatizar ese aire de libertad, las puertas delanteras han rebajado su altura para que los ocupantes puedan saltar al interior de un salto, lo mismo que los pasajeros de atrás, que cuentan con un reposapiés para ayudarse en esta maniobra.
En el interior el florido tapizado de sus asientos encaja perfectamente con su carácter. Igual que la idea de realizarlos en neopreno y colocar unos desagües, para que podamos limpiarlos a manguerazos.
Al ser un concept se podría haber prescindido totalmente de un techo, pero en Citroën querían innovar también con este y han fabricado uno bastante peculiar. En principio es una lona que se coloca manualmente, con la curiosidad de que se sustenta sobre unos paneles laterales levantados por una corriente de aire generada por un compresor. La misma que sirve para inflar la estructura de la tienda de campaña que se acopla a la trasera del coche.
Donde no hay nada fuera de lo común es en su mecánica. El motor de gasolina PureTech de 110 CV acoplado a la caja de cambios automática EAT6 es el encargado de moverlo. La ayuda del sistema Grip Control, garantiza que la tracción del eje delantero sea óptima sobre firmes deslizantes.
No veremos al Cactus M en la calle, pero quizás si algo medianamente similar.