Porsche es mundialmente reconocida por ser una de las marcas más fiables, algo con especial mérito dado el segmento en el que trabaja, donde sus rivales italianos nunca han destacado por ser precisamente indestructibles.
Uno de los males que lleva años afectando a estos coches es el de las combustiones espontáneas, y Porsche finalmente tampoco ha podido mantenerse ajeno a ellas. Al parecer habría ya 5 casos confirmados en los que sus flamantes y novedosos 911 GT3 (991) han sido presas de este germen.
Uno de estos sucesos ocurrió en Suiza, cuando el conductor detuvo su coche después de escuchar unos ruidos extraños provenientes del motor. Tras observar una mancha de aceite y algo de humo, el GT3 comenzó a arder de forma irremediable.
Otro de los casos tuvo lugar en Italia con el añadido de que la unidad en cuestión contaba con apenas 60 km de vida. En este caso el coche avisó de una pérdida de presión en el circuito de aceite, para posteriormente sufrir el mismo final.
Los ingenieros de Porsche están investigando los sucesos para encontrar el origen del fallo, que parece provenir claramente de una fuga de aceite. Un fallo de consecuencias catastróficas cuando el viscoso líquido se vierte sobre zonas que se encuentra funcionando a alta temperatura.
No lo han confirmado todavía oficialmente, pero como precaución Porsche parece haber paralizado las entregas de los GT3 hasta que resuelvan el problema.
Si eres el afortunado propietario de uno de estos espectaculares (aunque defectuosos) 911, mejor que no lo saques mucho de paseo hasta que se realice la pertinente llamada a revisión.
[Vía: WCF]