McLaren no termina de dar la fiabilidad que se supone que debe tener una escudería histórica. Eric Boullier fue la primera víctima de la serie de cambios que implementaron, sustituyéndolo por Gil de Ferran como jefe de competición antes del Gran Premio de Gran Bretaña. Una medida que de momento no ha mostrado cambios en los tiempos del monoplaza pero que se espera que en un futuro sí los haya.
"Sabemos que este fin de semana no será fácil para nosotros, pero lo haremos lo mejor posible. Tenemos que trabajar más en clasificación para tener más oportunidad el domingo, pero también hemos visto que durante la carrera podemos remontar y sacar puntos, por lo que el objetivo es lograr lo mismo en Alemania".
"Me encanta correr en Hockenheim y he ganado allí tres veces, así que es genial volver tras un año sin hacerlo. Hay una zona extra de DRS, así que con suerte podremos luchar. Necesitamos trabajar muchoy hacer todo lo posible para adaptar nuestra configuración a cada una de las dos próxima pistas para maximizar nuestras posibilidades":