Sebastian Vettel fue el dueño y señor del GP de Canadá 2018 de F1. Solo la vuelta rápida de Verstappen le quitó el Grand Chelem, aunque el suyo fue un fin de semana perfecto: pole, victoria y liderato en todas las vueltas de carrera. Lo hizo sin problemas y sin agobios, controlando el ritmo durante todo el domingo.
Fue su victoria número 50 y se coloca, además, líder, gracias a que su rival Hamilton perdió la batalla táctica con Ricciardo y, pese a los ataques del final, acabó quinto tras el de Red Bull. Ambos estuvieron fuera de un podio que completaron Valtteri Bottas y Max Verstappen manteniendo las posiciones en la que salían.
Carlos Sainz acabó en los puntos, siendo octavo detrás de su compañero Hulkenberg, cuya zaga vio durante gran parte de la carrera. El madrileño mantuvo detrás a Ocon, noveno, y Leclerc completó el top10 con otra meritoria actuación con el Sauber.
El monegasco heredó esa posición de Fernando Alonso, que era décimo hasta que un fallo mecánico en su MCL33 le hizo abandonar en su gran premio 300.
Sebastian Vettel mantuvo el liderato y, aunque Verstappen parecía salir mejor que Bottas, el finlandés de Mercedes se defendió y mantuvo el interior en el segundo giro para aferrarse a la segunda plaza. Ricciardo sí pudo ganar posición a Raikkonen y se puso quinto, tras Hamilton.
Por detrás, Lance Stroll arrinconó con dureza a Hartley contra el muro de la curva 6 y el coche del neozelandés se elevó, llevándose al Williams por delante y provocando el abandono de ambos. Salió el Safety Car y la carrera quedó neutralizada.