Roman Grosjean sorprendió a todos con su actuación en el Gran Premio de Australia, al conseguir sumar los puntos de un sexto puesto que supo a victoria en el seno de Haas F1, el equipo recién llegado a la Fórmula 1 que se acababa de convertir en un debutante ejemplar gracias a su VF-16 con motor Ferrari.
A pesar de ese prometedor inicio, quizá en parte beneficiado por el safety car tras el accidente de Alonso, Gene Haas ha explicado a los compañeros de Crash que el coche no tendrá más evoluciones que en las que se lleva tiempo trabajando, para centrarse así en el vehículo de 2017.
"Quitando algunas actualizaciones en las que hemos estado trabajando, ya hemos acabado con el coche de 2016. Vamos a ponernos con el de 2017 porque habrá un cambio bastante radical así que más que algunos pequeños cambios en el alerón delantero, no habrá nada radica nuevo en el coche de este año", ha comentado el señor Haas.