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Los nuevos dueños de la Fórmula 1, el conglomerado Liberty Media, ha otorgado una mayor libertad a los equipos y pilotos para que puedan compartir contenido a través de las redes sociales. Los equipos han podido mostrar pequeños vídeos de la primera sesión de test en Barcelona a través de sus respectivos espacios en Twitter, Instagram o Facebook.
En la era de Bernie Ecclestone las redes sociales se quedaron relegadas a un papel secundario, llegando a afirmar el antiguo supremo que la Fórmula 1 no necesitaba a una audiencia joven (dado que el poder adquisitivo era mayor en personas con una edad media más alta). Antes se prohibía cualquier grabación a quien no tuviera acuerdos de televisión o Formula One Management en sí, llegando a eliminar incluso vídeos que había grabado el propio Lewis Hamilton durante la pasada temporada.
Unos días antes de que empezaran con la sesión de test en el Circuit de Catalunya, a los equipos se les envió una carta animando a que lanzaran vídeos de corta duración en las redes sociales según el medio ESPN F1. De inmediato equipos como Mercedes, Red Bull o Toro Rosso comenzaron a hacer uso de ello, no solo con imágenes en pista sino grabando con los pilotos en diferentes momentos del día – un ejemplo fue el momento en que enseñaron los cascos de Daniel Ricciardo y Max Verstappen, acompañado de las imágenes oficiales.