Cuarta prueba de la temporada y tercera vez que el binomio medio(blanco)-blando(amarillo) se repite por parte de Pirelli. La compañía italiana va sobre seguro y no quiere que las altas cargas aerodinámicas que los monoplazas llevarán en el circuito chino pongan en excesiva prueba a los neumáticos. Hasta 3,8G sufrirán las ruedas transalpinas en el circuito de Shanghai este fin de semana, unido a la larga recta de meta, donde los neumáticos se refrigerarán.
“Siendo ésta la tercera carrera del año en la que seleccionamos la combinación de medio y blando, tras los cercanos tests de Barhéin, los equipos están empezando a acumular información sobre el funcionamiento de los neumáticos con los complejos coches 2014”, asegura Paul Hembery. “Como resultado, la estrategia de neumáticos está empezando a ser un factor más importante en las carreras. China es un circuito que ha demostrado la eficacia de una buena estrategia de neumáticos en el pasado, por lo que los equipos podrán hacer un buen uso de lo aprendido de los datos de la primera parte de la temporada, y explorar las opciones estratégicas disponibles con nuestra gama P Zero. Ya anteriormente hemos comprobado la variabilidad del clima en Shanghai, así que como siempre la capacidad de asimilar información rápidamente de acuerdo con las circunstancias cambiantes será la clave para obtener el máximo provecho de las cubiertas”.