La dificultad de generar beneficios en una empresa a día de hoy es una tarea complicada, tanto para las pymes como empresas internacionales que llevan años y años dentro de su respectivo mercado. Renault vuelve a ser un caso siginificativo que demuestra lo complicado que es tener un buen plan de negocio y ejecutarlo con solvencia.
El equipo francés, con Sainz y Hulkenberg como pilotos de F1, ha publicado sus cuentas en las que registra unos beneficios de 1.24 millones de euros durante la temporada de 2017. Estos números compensan totalmente las pérdidas de casi 4 millones en 2016, fecha en la que Renault volvía a hacerse con la propiedad del equipo de Enstone.
Una de las claves de su plan estratégico es la inversión en mejorar las condiciones de la fábrica: "La inversión a largo plazo de Renault se evidencia aún más en el balance financiero, donde los activos fijos han aumentado en 13,56 millones de euros (12 de libras), además del crecimiento de 13,3 millones de euros (11,8 de libras) en 2016".