Sainz se mostraba muy ambicioso antes de que diese comienzo este fin de semana ya que las condiciones de la pista se adaptaban perfectamente a su monoplaza. Tras la sesión de clasificación el madrileño ha chocado con la realidad y ha mostrado su disconformidad con el resultado obtenido. "No era nuestro objetivo hacer el 12º, era pasar a Q3 y hacer séptimo, que es el ritmo que hemos tenido todo el fin de semana. Por eso no estoy contento, este no era el objetivo de hoy".
"Las sensaciones fueron buenas al principio de la clasificación y malas al final. Hemos empezado con muy buen ritmo, haciendo una vuelta muy buena en Q1 y a partir de ahí, con problemas. Las temperaturas de ruedas cada vez que salía de boxes eran diferentes, tenia cada vez menos agarre, cada vez que la pista mejoraba yo involucionaba.... Tenemos que analizar por qué tenemos tantos problemas con las ruedas al salir desde boxes y por qué no podemos ser consistentes cuando salimos a clasificación". También analizó el uso del ultrablando. "Si el coche va como hoy, una vez que haces varias vueltas en carrera, se estabiliza. Pero con esta hiperblanda... para que la rueda dure varias vueltas tienes que estar pendiente de controlar las presiones, las temperaturas y no hemos estado bien ahí".