El piloto de Fórmula 2, Sean Gelael, ha explicado que conducir un monoplaza de Fórmula 1, en concreto, el SRT12 de la Scuderia Toro Rosso en el primer día de test de Bahréin “ha sido algo que nunca olvidará”. El indonesio cerró el día en octava posición (1:33.885) con un total de 78 vueltas.
"Hoy es un día que nunca olvidaré porque conducir un coche de Fórmula 1 es algo que todos los pilotos sueñan y hacerlo con Scuderia Toro Rosso lo hace aún más especial”, dijo Gelael. Asimismo continuó: “El coche de este año es una bestia, es tan rápido. He podido completar muchas vueltas y acostumbrarme al coche rápidamente. El poder y el agarre en general es increíble y, en comparación con el coche de Fórmula 2 que conduzco, el agarre en el frenado y el paso por las curvas son dos de las diferencias más grandes que sentí”. A lo anterior añadió: “honestamente, es muy divertido conducir y me gustaría dar las gracias a todos los que hicieron esto posible. Ahora no puedo esperar para conducir el STR12 de nuevo en unos meses en la prueba en Hungría”.
Por su parte, el jefe de desempeño del coche, Jody Egginton, concretó que se evaluaron una serie de “temas de desarrollo en los que han estado trabajando recientemente” pero que también ha sido “una oportunidad fantástica para que Sean Gelael muestre como es un coche de F1 actual”. “Sean condujo consistentemente, sin cometer errores y por lo tanto, debe estar muy feliz”, sentenció. Daniil Kvyat se subirá al monoplaza en la segunda tanda de test.