Sebastian Vettel no pudo revalidar el triunfo conseguido en el GP de Australia en 2018 ya que estuvo muy lejos de los Mercedes en cada vuelta. Quedarse fuera del podio en la primera carrera no es un buen comienzo para Ferrari, menos aún si se tienen en cuenta los buenos resultados conseguidos en los test.
El de Ferrari no esconde su decepción. "Simplemente fuimos lentos. No tuve la oportunidad de pelear con nadie, y solo traté de asegurarme de llegar al final. Estaba sufriendo con los neumáticos. Más allá del momento en el que paré, los demás sufrían menos, así que realmente no sé cuál era el problema".
Lo más preocupante para él es la facilidad con la que ha conseguido la victoria Mercedes. "Es sorprendente y chocante ver lo rápido que ha sido Mercedes y lo fácil que ha sido para ellos. Pero tenemos que mirar lo nuestro, tendremos unos días para hacer un buen análisis, ver todo lo que hemos recopilado y ver qué podemos hacer. Mantengo que este es un coche muy, muy fuerte, pero este fin de semana no logré encontrar ese rendimiento. En la carrera pensaba que sería mejor, pero fue al revés".