Carpenter Racing vuela en unos accidentados libres en Phoenix

El Gran Premio de Phoenix ha dado comienzo este viernes con la disputa de los primeros entrenamientos libres, los únicos antes de la clasificación, que tendrá lugar a las 23:00 (hora española). Tras las exhaustivas jornadas de test que la IndyCar llevó a cabo en el óvalo hace escasas semanas, todo apuntaba a que la acción sería más intensa hoy, en busca de los límites de las máquinas y los pilotos, y así ha sido, tanto en el lado positivo como en el negativo.

En el positivo, las velocidades siguen asombrando. En un óvalo de apenas 1.644 metros (1.022 millas), y con unas fuerzas G demenciales, Ed Carpenter lideró la tabla de tiempos con un espectacular promedio de 192.400 millas por hora, recorriendo el óvalo de Phoenix en 19.122 segundos. Su compañero de equipo, y empleado, Josef Newgarden, le siguió de cerca a tan sólo 18 milésimas. Hélio Castroneves fue el tercer piloto en rebasar las 192 mph de media, siendo el mejor de los Penske. Chevrolet fue la absoluta dominadora en éste apartado, copando el top 10 al completo. Ryan Hunter-Reay fue el mejor Honda, en 11º lugar y el único en rozar las 190 mph.

En especial, destacaron los hombres de Ganassi. Tony Kanaan, como de costumbre en los óvalos, se mostró muy rápido en todo momento y logró el cuarto mejor crono. Charlie Kimball también estuvo a la altura, siendo sexto, dos puestos por delante de Scott Dixon. Y por último, Max Chilton fue el primer piloto del día en alcanzar las 190 mph, y su vuelta le valió para acabar décimo, en un trazado similar al de Iowa, donde obtuvo su primer triunfo en óvalos el año pasado en las Indy Lights.

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— IndyCar Series (@IndyCar) 1 de abril de 2016

Por el lado negativo, estuvieron los accidentes, en plural. Dos impactos al comienzo de la sesión alteraron el programa establecido. El primero en besar el muro fue Takuma Sato, que perdió el control del coche entrando en la curva 1 e impactó con la parte trasera en el muro, dañando severamente su coche primario. Foyt, su equipo, espera poder reparar los daños de cara a la clasificación.

El segundo incidente, apenas minutos después de reanudarse la sesión, fue el de James Hinchcliffe. El canadiense, cuya última aparición en un óvalo en competición (mayo de 2015, Indianápolis) acabó con un brazo de una suspensión atravesándole la pierna y el pubis, no pudo controlar el tren trasero en la salida de la curva 2. Su incidente fue menos aparatoso, pero también impidió al piloto de Schmidt seguir rodando. La sesión se interrumpió una tercera vez, a escasos segundos del final, por piezas del coche de Luca Filippi en la pista.

El lider del campeonato, Juan Pablo Montoya, terminó en noveno lugar, el más discreto de los Penske hasta el momento, mientras que Alexander Rossi, debutante en óvalos al igual que Filippi, se adaptó con rapidez y acabó la sesión en 14º lugar. Los Coyne fueron los más discretos de largo, con problemas para bajar de 20 segundos. La clasificación, con intentos a una vuelta, debería ser un duro trance para ellos.