El formato es diferente, los coches son diferentes, incluso las gradas son diferentes (y mucho menos numerosas que en décadas pasadas), pero el Pole Day sigue conservando la magia de antaño. Tan diferente, y a la vez, tan similar. En un Fast Nine apasionante, James Hinchcliffe era el último en salir a pista tras conseguir el mejor tiempo ayer, y hoy, a la hora de la verdad, ha repetido, con un promedio de 230.760 millas por hora que le otorga la pole para la centenaria edición de las 500 millas de Indianápolis.
El piloto canadiense ha obtenido la primera pole de sus 6 años de carrera en IndyCar en un escenario inmejorable, el mismo que le negó por poco la primera posición de la parrilla en 2012 y 2014, y en el que hace un año estuvo a punto de fallecer desangrado tras un brutal accidente. Tras 2 minutos y 36 segundos de intento, su tiempo fue sólo 41 milésimas mejor que el de Josef Newgarden. El joven piloto norteamericano rozó la pole tras una espectacular primera vuelta en 231.5, y un promedio de 230.700, y afrontará la carrera por primera vez desde la fila frontal.
Completa la primera línea Ryan Hunter-Reay, el mejor de una Andretti muy sólida. Superó a sus compañeros Townsend Bell y Carlos Muñoz, pilotos muy veloces en Indy y que también rebasaron las 230 mph. Penske tuvo un papel mucho más discreto: Will Power cierra la segunda línea en sexto lugar, y los intentos del lider Simon Pagenaud y de Hélio Castroneves no fueron muy competitivos, siendo batidos por el espectacular pilotaje de Mikhail Aleshin.
Para Sam Schmidt (quien pudo pilotar en el óvalo un Corvette adaptado a su tetraplejía), las alegrías no terminaron con Hinchcliffe y Aleshin. Tras quedarse fuera del Fast Nine por un mal segundo intento el sábado, Oriol Servià mostró que tenía ritmo para mucho más. Completó 4 vueltas muy regulares y rápidas, todas ellas entorno a las 229 mph, y su promedio de 229.060 fue, de largo, el mejor de la sesión que definió las posiciones 10 a 33, por lo que saldrá en décimo lugar en la gran carrera.
Tras el español, sólo Alexander Rossi, el mejor rookie con mucha diferencia, y un buen Takuma Sato pasaron de 228 en esta sesión, marcada por las altas temperaturas y que mantuvo las velocidades en un perfil bajo. Los principales rivales de Pagenaud en la general, en especial los Ganassi, no calificaron bien y pierden aún más terreno con el francés: Scott Dixon, que tuvo que cambiar su motor antes de la clasificación, fue 13º, Tony Kanaan 18º y Graham Rahal remató una semana para el olvido con un 26º lugar.
Juan Pablo Montoya protagonizó la anécdota del día, al verse notoriamente ralentizado durante su segunda vuelta por una bolsa de basura que se quedó enganchada a su alerón delantero. Se le permitió un nuevo intento, en el que sus tiempos fueron a peor, y saldrá desde el puesto 17. La última fila es un epítome del fracaso que, fuera de Sato, ha supuesto esta clasificación para Foyt: desde ella saldrán Jack Hawksworth, Buddy Lazier y Alex Tagliani, que se accidentó en la curva 4 en su vuelta de calentamiento golpeando contra el muro de boxes. Todos ellos estarán, aún así, en la carrera del próximo domingo, una edición cuya parrilla anticipa un espectáculo sin igual.