De vez en cuando, Sébastien Bourdais saca a pasear el talento y, sobre todo, la inteligencia que le llevó a ganar la Champ Car en cuatro ocasiones. El piloto francés obtuvo la victoria en la primera cita del Dual in Detroit este sábado en el Belle Isle Park, merced a una apuesta que dio réditos y, sobre todo, a una lluvia que nunca llegó a caer con fuerza, pero cuyas consecuencias estratégicas jugaron un papel clave.
La prueba fue dominada por Penske durante los dos primeros tercios de la misma. A los tres pilotos que habían clasificado arriba (Simon Pagenaud, Hélio Castroneves y Juan Pablo Montoya) se les unió Will Power, quien se plantó en quinto lugar en el primer periodo de paradas, durante un caution tras un accidente de Max Chilton. A pesar de ello, Pagenaud y Castroneves no pudieron montar neumáticos duros antes del caution, lo que comprometería su carrera a nivel estratégico.
Power animó el panorama escalando a la segunda posición en la resalida. Tras la segunda parada, salió por delante de Pagenaud, pero por detrás de Montoya. Logró rebasar al colombiano con una maniobra al límite en la curva 3 de la que se valió Pagenaud para pasarlos a ambos. El australiano, no obstante, desapareció de la prueba al perder una rueda durante el segundo caution, causado por un accidente en solitario de James Hinchcliffe, que rodaba quinto y sufrió un fallo mecánico.
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Del grupo de seis pilotos que no ejecutó parada, Gabby Chaves quedaría descartado a posteriori por falta de ritmo, y problemas eléctricos terminaron con la carrera de Dixon. Por tanto, Montoya, Graham Rahal, Bourdais y Conor Daly eran los cuatro hombres que contaban con el ritmo suficiente para aprovechar la ventaja de alargar parada respecto a Castroneves y Pagenaud, que se cubrieron ante la posibilidad de una lluvia que nunca llegó. Y ahí entró en juego Bourdais, quien había comenzado la carrera en 13ª posición.
El francés, que encadenó varias vueltas veloces una vez pararon Montoya y Rahal, aprovechó el tapón de Pagenaud, que buscaba ahorrar combustible, para salir de boxes en cabeza por delante de los Penske. Daly hizo lo propio unas vueltas después, saliendo justo detrás de Bourdais. Contando con mayor temperatura en las gomas, Bourdais logró abrir un pequeño hueco que sólo el tráfico pudo comprometer en la penúltima vuelta, y obtuvo la victoria número 34 de su carrera, igualando a Bobby Unser como el sexto piloto con más triunfos en IndyCar.
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Tras escaparse el podio en el Gran Premio de Indianápolis con otra estrategia arriesgada, Daly obtuvo un segundo puesto que sabe a gloria: su primer podio en IndyCar y el primero de Coyne desde la extraña victoria de Carlos Huertas en Houston 2014. Por su parte, Montoya y Rahal lograron pasar a Pagenaud, pero ya era tarde para pelear por la victoria, y se conformaron con el tercer y el cuarto lugar.
Pagenaud tuvo que afrontar las dos últimas vueltas sin casi gasolina, y acabó en el puesto 13. Castroneves consiguió defender la quinta posición de los ataques de Carlos Muñoz, que usó una estrategia similar al haber montado los neumáticos duros desde el principio, Ryan Hunter-Reay, Charlie Kimball y Tony Kanaan. El flamante ganador de las 500 millas de Indianápolis, Alexander Rossi, no se complicó la vida y consiguió su tercer top 10 consecutivo.
El abandono de Dixon ha permitido a Pagenaud mantener una ventaja muy similar a la que ya poseía de cara a la carrera de mañana. Aventaja en 59 puntos a Castroneves, nuevo segundo clasificado, y en 66 a Dixon. Mañana tendrá una nueva oportunidad para resarcirse, tanto en la breve sesión clasificatoria (16:45 hora española) como en la carrera (21:45).