Dorna y la FIM se reúnen para elaborar un catálogo de sanciones

Las penalizaciones siempre han sido fuente de conflicto en el deporte. Casi nunca dejan satisfechas a todas las partes. Los jueces suelen estar en el disparadero, ya sean turbias o claras las acciones. En MotoGP, por supuesto, también han traído cola siempre. Pero, a diferencia de otras disciplinas, en el motociclismo siempre ha faltado un reglamento exhaustivo hasta el más mínimo detalle sobre qué es punible y qué no.

Hasta 2016, todo el peso de los castigos caía sobre la Dirección de Carrera, que estaba formada por tres miembros, uno de ellos de Dorna. A raíz de los sucesos de Sepang 2015, los promotores optaron por salir de esta estructura. Así se creó el Panel de Comisarios, que es, de verdad, quien penaliza y no la Dirección de Carrera. La confusión, para algunos, llega porque se da el caso de que el Panel está compuesto por tres personas y una de ellas es Mike Webb, que, a su vez en uno de los directores de carrera. Los otros dos en el Panel son miembros de la Federación Internacional de Motociclismo (FIM).

Antes y ahora las decisiones obedecían a razones más subjetivas. Son ellos los que interpretan un reglamento que establece normas de ámbito más bien general. Cada año se pulen defectos, especialmente con los procedimientos de salida, pero siguen quedando lagunas, que son fuente de controversia.

Sin embargo, la intención de MotoGP es cambiar de cara a 2019. Según ha podido saber MARCA, ayer en Madrid se produjo una reunión en la que miembros de Dorna y la FIM sentaron las bases para la elaboración de un catálogo de sanciones. Se trata de unas líneas maestras que se tendrán que pulir más, pero con el reto de que esté incluido en las reglas del próximo Mundial.

El encuentro entre todas las partes ya estaba previsto antes de lo ocurrido en Termas de Río Hondo, pero, obviamente, se cambió el orden del día para tratar lo sucedido. El reto es lograr entrar más en detalle en las acciones, lograr que todos los pilotos acaben entendiendo que si, por ejemplo, tocan con el codo a otro, la sanción será de un modo. Se busca que todo esté bien tipificado para hacer más sencilla la labor del Panel, que es quien seguirá sancionando, y la comprensión de equipos, pilotos y aficionados. Desde tiempos inmemoriales, se ha justificado que no hay dos lances iguales y, por ello, no se confeccionó este memorándum. Por supuesto, esta obviedad se mantendrá, al igual, que una mínima parte de subjetividad. La misión es reducirla.

Este trabajo responde, al fin, a una petición de varios pilotos desde hace algunos años, como Dani Pedrosa, quien clama por este listado casi desde que está en la categoría reina. De hecho, el propio Sete Gibernau, su asesor deportivo, ya pidió en Argentina que se aclarara más qué es sancionable y qué no.

El objetivo, además, es que este catálogo que se hace para MotoGP sea extensible a otros campeonatos ya sean de velocidad o de diferentes disciplinas. Por eso, el borrador final será elaborado por la Federación Internacional. En ningún caso se desea regresar al carnet por puntos, del que consideran que no dio los frutos adecuados y que dejó de aplicarse a la conclusión de 2015.