El vigente campeón del mundo fue uno de los pocos que salvaron la caída durante la carrera del GP de las Américas. Jorge Lorenzo no pudo hacer frente a un indomable Marc Márquez, pero poco a poco solventó los problemas con los Michelin, en una cita donde la marca francesa seguía estando bajo la mirada de todos.
El balear hace una lectura positiva como viene siendo habitual, en una carrera donde ha tenido que jugar contra su propia montura, con unos compuestos que no permiten errar: “Era muy importante terminar la carrera y conseguir los 20 puntos después de la caída del warm up por la mañana; era difícil mantener la concentración. A principio de carrera ha sido complicado porque la pista estaba resbaladiza con el neumático duro y el depósito lleno, especialmente en las frenadas”.
Tal y como ha considerado Lorenzo, los errores que cometió durante la salida los ha pagado caros, ya que no podía seguir al de Cervera, como se pudo ver durante todo el fin de semana, en unas complicadas condiciones:“He cometido algunos errores que no suelo cometer en la primera vuelta. No podía mantener el ritmo de Marc, él estaba marcando la diferencia durante el fin de semana y también lo ha hecho en carrera. Yo era suficientemente rápido para estar segundo y terminar la carrera. Se podía ver lo complicado que era por todas las caídas. Lo importante era terminar y lo he conseguido”.
Por ello, el espartano deja atrás una gira americana agridulce pero siendo el único en plantarle cara al 93 en un territorio fetiche para él. El de Yamaha llega a la temporada europea con la mirada puesta en Jerez, que al ser un trazado Stop&Go le debería de ir mejor.