Los Chevrolet Cruze RML TC1 y los Citroën C-Elysée TC1 llevarán más peso de cara a la próxima prueba del Campeonato Mundial de Turismos, celebrada en el mítico circuito de Nürburgring Nordschleife. Los Citroën llevarán el máximo de 80 kilogramos al igual que los Volvo S60 Polestar TC1, mientras que los Honda Civic pasarán de tener 80 a 70 kilogramos.
Durante el ajuste del Balance of Performance en Hungría, se observó la competitividad de los Citroën, tanto del de Münnich Motorsport pilotado por Rob Huff que consiguió la pole position y la vuelta rápida como los de Sébastien Loeb Racing, presentes en el podio de ambas carreras. De este modo, la máquina que dominaba el WTCC con Citroën Racing regresa al máximo de peso por primera vez desde la marcha del equipo oficial de la casa de los dos chevrones.
Mientras tanto, los Honda serán 10 kilogramos más ligeros a la vez que los Chevrolet se quedarán con un total de 30 kilogramos. Los únicos coches que de momento no llevan penalización de peso son los dos Lada Vesta TC1 del equipo RC Motorsport, manteniéndose en el mínimo de 1.100 kilogramos, tal como cuenta el medio Touring Car Times.