Tom Chilton ha decidido cambiar de equipo para la temporada 2018 del Campeonato Británico de Turismos, pasando de Power Maxed Racing a Motorbase Performance. De este modo dejará de pilotar los Vauxhall Astra para volver a estar al volante de los Ford Focus, modelo con el que ya compitió en 2011.
Chilton ha estado centrado durante las últimas temporadas en el Mundial de Turismos como piloto del Sébastien Loeb Racing, pilotando unidades privadas del Citroën C-Elysée TC1. De hecho no sólo acabó tercero en la temporada 2017 – la última del Mundial de Turismos como tal ya que pasará a ser el WTCR en 2018 – sino que se llevó el título para pilotos privados.
“Motorbase es uno de los equipos más profesionales en la parrilla y creo que encajaré muy bien. Estoy emocionado de estar de vuelta en el Ford Focus. La última vez que competí en el Focus fui coronado campeón de la Indy británica en 2010, así que es genial estar de vuelta”, declaró Chilton según Motorsport News.
“Estoy completamente centrado en un campeonato entero el próximo año, el BTCC. Me encantan los fans y la competición. Es un campeonato tan competitivo, no hay otro certamen en el mundo tan reñido como el BTCC, cada victoria y cada podio son tan especiales. Quiero mantener mi inercia del título del WTCC y quiero ser campeón británico, ese es el objetivo para el año que viene”, añadió Chilton.