En la pasada carrera en Montreal, el funcionamiento de los neumáticos había sido óptimo, a pesar de que Pirelli llevara las gomas más blandas de su gama. Dejando a un lado las dos zonas de DRS, adelantar en esa pista era una tarea relativamente difícil, pero se ha visto que los pilotos podían rodar cerca del coche de delante durante un largo periodo de tiempo.
El ejemplo más destacado había sido la intensa batalla entre Max Verstappen y Carlos Sainz por la victoria desde que se marchó el coche de seguridad al final de la vuelta 54 hasta la bandera a cuadros. El español siempre fue la prolongación del Red Bull, lo que puso de manifiesto que la reducción del aire sucio ha sido notable con los monoplazas de este año.
Por otro lado, Mario Isola ha destacado el buen funcionamiento de sus neumáticos durante esta sesión, permitiendo a los pilotos empujar durante muchas vueltas y sus gomas no desfallecieran en mitad de estas luchas. Con lo visto en la carrera, Isola estuvo satisfecho, pero sabe que aún hay margen de mejora.
"Lo importante de esta carrera fue ver que tuvimos lo que se llama una competición ajustada. Uno de los objetivos de este año era dar la oportunidad a los pilotos para que empujaran y lucharan en pista, y es lo que sucedió con Max y Carlos, pero también con Alpine y Leclerc, y con otros muchos coches. Esto significa que los neumáticos están dando esta oportunidad y es positivo ver lo que está pasando. Obviamente, sabemos que podemos mejorar para el futuro y estamos trabajando en las gomas del próximo año", finaliza el responsable de Pirelli en una entrevista realizada por Motorsport.com.