Sebastian Vettel terminó tercero en la carrera de China, por detrás de los dos monoplazas de Mercedes. La distancia entre ellos es muy grande y Vettel es consciente de lo complicado que es superar en este momento a los pilotos del fabricante alemán.
Se mostró contento pese a no poder con los rivales principales. "Estoy feliz de estar en el podio, pero es difícil porque intentamos seguir su ritmo, pero no pudimos", dijo. Además, no quiso pronunciarse acerca de la orden de equipo de Ferrari para que pudiese pasar a Leclerc.
"Fueron demasiado rápidos desde el principio. Tuve una batalla con Max, que fue muy divertida, pero el objetivo era tratar de perseguirlos. Fueron demasiado rápidos para nosotros, muy bien hecho por parte de Lewis y Valtteri".