Las condiciones de la pista en la clasificación de F2 han sido todo lo contrario a las que hubo en F3. Aunque el asfalto no estaba completamente seco, ya que todavía había zonas húmedas, los pilotos pudieron rodar con los neumáticos sin surcos de principio a fin. Eso sí, como los pianos seguían mojados, había que evitarlos a toda costa para minimizar la probabilidad de sustos. Sin embargo, Jüri Vips se había subido demasiado al de la salida de la curva 1, esto provocó que perdiera el control de su monoplaza y quedara cruzado en mitad de la trazada. Y como el motor se le había calado, el estonio no tuvo ninguna oportunidad de seguir compitiendo. Ante este percance, los comisarios ondearon la bandera roja.
Una vez se reanudó la sesión, Felipe Drugovich había estado a nueve décimas del más rápido en su primera vuelta lanzada, pero fue cuestión de tiempo que ganara confianza y alcanzara un ritmo difícil de igualar. Su segundo intento había sido determinante para escalar al primer puesto, además, lo hizo con una ventaja de casi cuatro décimas sobre el resto de rivales.
Esto no era nada en comparación a lo que sería capaz de hacer con gomas nuevas. El brasileño pulverizó su registro anterior, dejando a Doohan y Lawson a siete décimas en esta ocasión. La pole position iba a ser suya e hizo todo lo posible para que así fuera. Gracias a esta vuelta asombrosa, nadie pudo quitarle el primer puesto en la parrilla del domingo.
Por detrás del poleman, Enzo Fittipaldi finalizó segundo, quedándose a tres décimas del brasileño, seguido por Logan Sargeant, Jack Doohan, David Beckmann, Liam Lawson, Richard Verschoor, Théo Pourchaire, Jehan Daruvala y Ralph Boschung, que volvía a competir este fin de semana, cerró el Top 10.