No todos los días se cumplen 100 años y la ocasión, bien merece un homenaje. Aston Martin se ha convertido este año en una marca centenaria y como parte de las celebraciones, han mostrado al mundo su nuevo CC100 Speedster Concept.
Un coche único que como en muchas otras ocasiones y especialmente en celebraciones de aniversarios, ha recurrido al pasado para inspirarse. El Aston Martin DBR1 vencedor de las 24 Horas de Le Mans en 1959, ha sido el elegido para ceder sus trazos principales al CC100.
La ausencia de techo en este biplaza de estilo clásico con su habitáculo dividido en dos por la estructura de fibra de carbono, lo convierten en una barchetta de competición pura. Las puertas, que se limitan a la mínima expresión dejando una obertura en los laterales del habitáculo y las dos jorobas tras los reposacabezas, acaban de darle forma.
En general es un diseño bastante puro de líneas, y eso se ve también en su habitáculo minimalista. La fibra de carbono y el cuadro digital se mezclan con las cinchas de cuero y los mandos de estilo clásico, en un interior que no desviará nuestra atención de la conducción.
El motor empleado es el V12 de 6.0 litros de la casa, lo mismo que el cambio automático de 6 relaciones. Las prestaciones no son tan vertiginosas como en otros rivales de su porte, pero el 0 a 100 km/h se hace en unos 4 segundos y se alcanzan los 290 km/h.
En principio es solo un prototipo, pero quizás se fabriquen un par de ellos y se pongan a la venta, solo quizás.