Durante el Salón de Ginebra no solo se están presentando nuevos modelos y concepts, también está habiendo tiempo para recabar información sobre el futuro de algunas marcas y, de la mano de Auto Express, hoy podemos conocer algo más sobre el que le depara a Bentley.
La firma de Crewe ya tiene muy avanzado su próximo lanzamiento, el lujoso SUV con el que pretenden abrir un nuevo nicho de mercado atendiendo a una demanda existente. Ya está confirmado que este será el primer Bentley en hacer uso de una mecánica híbrida enchufable y, en contra de lo que habían dicho hasta ahora, quizás también lo sea en montar un motor diesel.
Dejando el SUV a un lado y echando la vista unos cuantos años más adelante, la próxima novedad que podríamos ver en la gama de Bentley sería una berlina de acceso. Así lo insinúan su presidente y su director de marketing.
En Bentley ya poseen dos grandes berlinas como el Mulsanne y el Flying Spur, que por precio y tamaño se sitúan muy lejos de un mercado en el que los Maseratti Quattroporte, Porsche Panamera y las versiones más altas de los Mercedes Clase S y BMW Serie 7, se llevan un buen puñado de ventas.
Es a ese público adinerado con posibilidades de comprarse una berlina de 150.000 euros, que no sea tan opulenta como las actuales de su catálogo, al que quieren llegar. Un coche que no sería en ningún caso ‘barato’, pero que abriría la marca a un terreno de mercado mucho más amplio.
Después del SUV, este es el siguiente paso lógico y tiene muchas posibilidades de darse. Aunque desde Bentley ya señalan que antes de que llegue este nuevo modelo, se tienen que producir las renovaciones de los Continental GT y Flying Spur, además del aterrizaje del SUV.
