Imagen del claxon extraída de la página web recambioscoches.es
El claxon es uno de los elementos a los que muchos conductores le dan un uso muy frecuente y no siempre es el uso más adecuado. Debemos admitir que el uso del claxon, pese a que la mayoría de conductores coinciden en que este debe ser utilizado para avisar de algún peligro, se utiliza actualmente más para quejarse que para su función original. Esta actitud no es solamente molesta para el resto de personas, sino que, además, hace que la gente relacione el pitido de un claxon con la información incorrecta.
Por otro lado, existen una serie de situaciones en las que el uso del claxon es necesario y hay que utilizarlo en la medida adecuada. Los casos son los siguientes:
Para evitar un posible accidente: este es el caso más claro para cualquier conductor. Es necesario hacer sonar el claxon para prevenir un accidente, especialmente en una situación de poca visibilidad o al circular por vías estrechas.
Al realizar un adelantamiento: en este caso, la mayoría de conductores se decanta por utilizar únicamente el intermitente para avisar de un adelantamiento, sin embargo, el uso del claxon está recomendado para avisar al vehículo que se encuentra delante de que lo vamos a adelantar.
Para circular como vehículo prioritario en servicio de urgencia: este caso es mucho menos frecuente. En el caso de vernos en esta situación, es necesario encender las luces de emergencia y hacer sonar el claxon de manera intermitente. Además, también se puede agitar un pañuelo por la ventanilla, aunque en este caso es mejor que lo haga otro pasajero que no esté conduciendo.
El claxon no tiene una vida útil limitada, sin embargo, igual que el resto de componentes, este puede dejar de funcionar completamente o el sonido puede llegar a ser demasiado bajo. Para poder diagnosticar correctamente el origen de la avería existen una serie de acciones que hay que llevar a cabo.
En el caso de que la luz del habitáculo se vuelva más tenue al apretar el claxon, el problema se trata de un cortocircuito. Otra manera de saber si el claxon está averiado es conectar una bombilla de 12 V en vez del claxon y apretar el botón de este, si la bombilla se enciende, el problema radica en el claxon. Además, también es necesario revisar el estado del fusible del claxon. Otro elemento que puede provocar un fallo del claxon son los airbags, pero estos deben ser comprobados en un taller por motivos de seguridad.
