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Mazda ha mostrado en el Salón del Automóvil de Los Ángeles la segunda generación de su crossover CX-5, el modelo que incorporó al mercado la tecnología de motores Skyactiv en 2012. La nueva versión mantiene las mismas tendencias que el modelo original, llevando a su vez la filosofía de diseño actual de la marca japonesa.
El CX-5 nuevo está disponible con dos motores de gasolina (un 2.0 y un 2.5) y un diesel de 2.200 centímetros cúbicos. Tanto en diesel como en gasolina están disponibles las cajas de cambios de seis marchas manual o automática, además de contar con tracción total como elemento opcional.
En los sutiles cambios al diseño se incluye un centro de gravedad 10 milímetros más bajo, pasos de vía más anchosy una modificación del pilar A, que ahora está 35 milímetros más retrasada. El maletero continúa teniendo la misma capacidad de 505 litros cúbicos según el medio Top Gear.
Otras de las mejoras se encuentran en la reducción de ruido en la marcha, además de haber aumentado la rigidez torsional del vehículo en un dieciséis por ciento. La marca aún no ha detallado los precios del nuevo CX-5 ni en Europa ni en su red de concesionarios en España.
