La versión carreras-cliente del McLaren P1, el P1 GTR, ya es oficial. El P1 GTR Design Concept nos los adelantó muy fielmente, y la posterior vista de su interior y el conocimiento de su programa de competición ya acabaron prácticamente con todas nuestras incógnitas. Solo quedaba que lo presentasen oficialmente, justo lo que acaban de hacer.
Partiendo del exótico P1, los diseñadores de Woking han elaborado un auténtico monstruo de carreras a través de una serie de aditamentos aerodinámicos, con el gran alerón fijo como protagonista, que mejoran su carga aerodinámica un 10%. Vías ensanchadas 80 mm y carrocería rebajada 50 mm, con una suspensión pensada para circular exclusivamente por circuito, aseguran una dinámica de infarto.
Los neumáticos slick Pirelli montados en llantas monotuerca de 19 pulgadas, son otro elemento vital para su uso, y dejan claro que el GTR no tiene ninguna intención de pisar la calle. Es un coche exclusivamente de circuito, aunque no se ha creado bajo la restricción de ningún reglamento.
Mejorar el P1 a nivel técnico no era tarea fácil, pero aun así se han conseguido logros como rebajar el peso 50 kg, gracias a nuevos elementos como las ventanillas de policarbonato y el escape realizado en titanio (que ahorra 6,5 kg). El motor también se ha llevado su ración de mejora, y ahora el bloque híbrido V8 twin-turbo anuncia una cifra de potencia redonda: 1.000 CV.
El interior del P1 de calle ya es uno de los más espartanos de cuantos podamos encontrar, pero en el del GTR se ha ido un paso más allá eliminando los pocos guarnecidos existentes, el asiento del copiloto y colocando un volante propio de un Formula 1.
Tras pagar los aproximadamente 2,5 millones de euros que costará el McLaren P1 GTR, el cliente accede directamente al mundo de la competición a través de las McLaren Ultimate Series. Un campeonato cerrado y exclusivo para los pocos afortunados dueños de estos bólidos, que los llevará por los mejores circuitos del mundo con el asesoramiento, entrenamiento y soporte de McLaren.
Los colores de guerra con los que se ha mostrado la unidad que McLaren se llevará al Salón de Ginebra, coincidentes con los del McLaren F1 GTR que fue tercero en las 24 Horas de Le Mans de 1995, no son solo por homenaje a esa leyenda. También sirven para que sus clientes se hagan una idea de cómo podría quedar su coche, pues además de hacerles el asiento a medida, se lo decorarán como ellos elijan.
El portentoso Ferrari FXX K ya no está solo en el mundo, ahora tiene en el nuevo P1 GTR un espejo en el que mirarse. Sería bonito que ambas marcas entrecruzasen sus programas de competición y permitiesen enfrentarse a sus clientes con ambos monstruos de la pista, pero algo me dice que eso no va a pasar.