Con esto de que las presentaciones de un nuevo modelo a veces se alargan durante meses, puede parecer que ya conocemos un coche cuando aún faltan ciertas cosas. El McLaren P1 lleva tiempo entre nosotros, pero no ha sido hasta ahora cuando nos han contado todas sus especificaciones técnicas.
En lo que concierne a su motor si es verdad que sabemos sus características desde hace tiempo. El bloque híbrido lo forman un motor V8 de 3.8 litros Twin-Turbo y uno eléctrico con una potencia y un par conjuntos de 916 CV y 900 Nm respectivamente.
Cuando toda esa potencia se envía a las ruedas traseras el P1 logra alcanzar los 100 km/h saliendo desde parado en 2,8 segundos. De continuar con su carrera, los 200 km/h llegarán en apenas 6,8 segundos y los 300 km/h en 16,5 segundos, unas cifras de vértigo. Y así hasta alcanzar los 350 km/h de velocidad máxima (limitada electrónicamente).
Tan importante o más como lo rápido que puede alcanzar velocidad, es lo rápido que puede perderla. Para detener el P1 desde los 100 km/h no se necesitan nada más que 2,9 segundos y 30,2 metros. Tiempos y distancias que pasan a ser de 4,5 segundos y 116 metros si queremos parar yendo a 200 km/h, y de 6,2 segundos y 246 metros si hablamos de detenernos desde los 300 km/h.
Más de uno y más de dos propietarios del P1 lo llevarán alguna que otra vez a disputar una drag race. Les vendrá bien saber que para completar un cuarto de milla (400 metros) solo necesitarán 9,8 segundos, pasando por la meta a 245 km/h.
Aunque a muchos de sus propietarios les dará igual, el consumo medio homologado es de 8,3 litros con unas emisiones de 194 g/km de CO2. Otra de las virtudes del P1 es que puede circular en modo totalmente eléctrico, apenas da para 11 km, pero suficientes para no tener que arrancar el V8 en algunas ocasiones, si se quiere.
