Hace mucho, mucho tiempo, que el mercado de automóviles se ha entregado casi por completo a los SUV de todo tipo de formas y tamaños. Son los coches de moda y contra eso no podemos hacer nada. Una moda nada pasajera al que todas las marcas se han sumado con gusto, ya que este tipo de vehículo les aporta mayores beneficios al final de la venta.
Esta semana en RevistaScratch pudimos disfrutar al volante del Seat Ateca en su variante de gasolina de 150 cv. Un coche muy completo, sin extravagancias y que cumple con cada uno de sus cometidos.
Lo mejor
La unidad de prensa que probamos, con un paquete de acabados intermedio, sería el equilibrio perfecto entre los que buscan un SUV de un tamaño medio-grande, así como los que no quieren que la factura se dispare más allá de los 35.000 euros, algo que hoy en día no es nada sencillo debido a la inflación que sufrimos.
El Ateca es un coche sobrio, que no atrae miradas cuando circulas por la calle, que no suena de más, que no brilla, pero siempre está ahí. No falla nunca, es como ese buen amigo de toda la vida que siempre está cuando se le necesita. Espacio, seguridad, comodidad, tiene lo justo y necesario para ser el típico coche de familia.
Habiendo probado ya diferentes versiones, me gustó especialmente esta variante por su aplomo en el paso por curvas, sin ser un vehículo deportivo, pero dejando notar unas ciertas aptitudes Racing para los padres/madres de familia más carreristas.Mención especial también para sus acabados de buena calidad, con materiales nobles en el picadero que destilan una mayor elegancia de lo que se le presupone a un coche de estas características.
Por mejorar
Pese a los pequeños ajustes estéticos que recibió hace unos años respecto a la primera versión, el Ateca me sigue pareciendo un coche estéticamente soso, un punto por debajo de sus primeros Skoda Karoq o Volkswagen Tiguan. Pese a ello, luce mucho mejor ahora.
Tampoco nos acabó de gustar, y viene siendo algo recurrente en los vehículos de última generación del Grupo WAG, su interfaz de infoentretenimiento. El sistema se satura, se bloquea en demasiadas ocasiones y empieza a fallar. En esta ocasión, durante una mañana se nos reinició la pantalla cada 10 segundos, dejándonos horas sin opción al navegador, música, etc. En los tiempos que corren, donde esta parte es tan importante para muchos futuros compradores, habría que afinar para minimizar estos fallos molestos.
Valoración: 7/10
El chico bueno, el vecino que te presta sal cuando más lo necesitas. No te irías con él la primera vez que lo ves, pero cuanto más lo conoces más cariño le tienes. Amigos, el Ateca sería el fiel amigo, no tengo duda, y pese a que las “Friend Zone” sean duras con ellos, al final todo el mundo necesita un fiel amigo a su lado. Si quieres un coche funcional, bonito, grande y sin estridencias, el Ateca es un seguro de vida.