Corren malos tiempos para las berlinas clásicas, especialmente si son de fabricantes generalistas. Los SUV y los compactos les han comido tanto terreno, que las han obligado a dar lo mejor de sí, justo lo que acaba de hacer Renault con su Laguna, al que ha hecho desaparecer para dejar sitio a su nuevo Talisman.
El primer Laguna se presentó con un diseño revolucionario, que en su segunda generación se hizo más comedido y en la tercera terminó siendo totalmente insulso. Con una imagen que carecía ya de reconocimiento alguno, seguir con ese nombre habría sido más perjudicial que beneficioso, razón por la que se parte de cero nuevamente.
El Talisman no solo aparenta ser más coche, también lo es con sus 15 cm de longitud extra. En su diseño se ha impreso dinamismo y elegancia a base de líneas con personalidad, algo necesario para seguir captando la atención de quien todavía quiere un coche ‘clásico’. Razón también por la que ahora su carrocería es de 4 puertas en lugar de 5.
Pese a haber perdido la practicidad del portón, Renault seguirá ofreciendo la carrocería familiar denominada Grand Tour. Esta tiene el plus de contar con esa gran puerta de carga y un maletero que puede cargarse hasta arriba, pero el espacio no debería ser problema tampoco en la berlina, ya que cuenta con un enorme maletero de 608 litros.
El último Espace ha supuesto un punto y aparte respecto a sus antecesores, por concepto y por calidad. Y el Talisman bebe mucho de este, con el que comparte la nueva plataforma modular CMF, su sistema de dirección a las 4 ruedas (que estrenó el Laguna) y su suspensión adaptativa.
El aroma a Espace se vuelve a respirar en el interior, con un elegante y sencillo salpicadero cubierto de cuero. En el cuadro aparece una pantalla TFT que nos brinda múltiples informaciones que se completan con un Head-up Display, pero sin duda la gran protagonista es la pantalla central del salpicadero.
Colocada en posición vertical y con un tamaño máximo de 8,7 pulgadas, integra el sistema multimedia R-Link 2 que cuenta con varias aplicaciones propias. Aunque eso será en el mejor de los casos, pues hay sistemas inferiores que se conforman con pantallas de 7 o de 4,2 pulgadas.
También contará con el selector de modos de conducción Multi-Sense, que actúa sobre motor, dirección, cambio, amortiguación, iluminación interior e información del cuadro, en función de los cinco modos disponibles: Neutral, Eco, Confort, Sport y uno personalizable.
Renault estructura la gama del Talisman en cinco niveles de equipamiento: Life, Zen, Business, Intens e Initiale Paris. En torno a los cuales gira su gama de motores, con los diesel 1.5 dCi 110 y 1.6 dCi 130 y 160, y los gasolina 1.6 TCe 150 y 200. Una caja de cambios manual o la automática de doble embrague EDC, son las opciones para su transmisión.
Como cualquier vehículo moderno podrá contar con múltiples ayudas a la conducción, como frenado de emergencia, aviso por cambio involuntario de carril, detector de objetos en el ángulo muerto, asistente de aparcamiento con cámara trasera y control de crucero activo.
Renault presentará el Talisman en el próximo Salón de Frankfurt, para ponerlo a la venta antes de que acabe el año.