Aprovechando que se celebra el SEMA Show estos días en Las Vegas, Subaru ha llevado una versión especial de sus WRX y WRX STI al evento, que le sirven de coche de exhibición a la vez que de presentación de la que será una de las últimas ediciones de estos modelos.
Al contrario de lo que se suele presentar en la feria, estos Subaru apenas reciben cambios respecto a las versiones de serie. Por fuera el protagonismo se lo lleva la pintura naranja, que se conjunta con detalles en negro como la parrilla, las llantas, las carcasas de los retrovisores y las bandas adhesivas de sus laterales.
Dentro ocurre algo similar, pero al revés. El negro predomina en tapizados y paneles, roto solo por el contraste de ribetes y costuras naranjas en alfombrillas y asientos. Demasiada cordura para presentarse en la que es una de las ferias tuning más importante del planeta, sino la que más.
El motor turboalimentado de 2.5 litros y cuatro cilindros en disposición boxer tampoco ha recibido cambios, y sigue ofreciendo potencias de 265 CV en el WRX y 305 CV en el WRX STI.
Lo bueno de que estos coches presentados en el SEMA sean tan racionales es que son perfectamente utilizables en la calle, y por eso Subaru pondrá a la venta 300 unidades (100 del WRX STI y 200 del WRX) disponibles para el mercado norteamericano desde mediados de 2013.