Robert Kubica ya tiene volante para el campeonato alemán de turismos de 2020 puesto que ha fichado por ART Grand Prix. Se trata de una estructura privada que regresa a la especialidad poniendo en liza un solo BMW M4 DTM, el cual estará destinado obviamente al corredor polaco. Así lo han comunicado este jueves ART GP y BMW.
“El DTM me interesa mucho desde hace tiempo y el test de diciembre de Jerez de la Frontera me dejó con ganas de más. Tengo ganas de empezar este capítulo nuevo en mi trayectoria., ha manifestado Kubica a la página web Motorsport.com
De este modo, el de Cracovia alternará sus labores como piloto reserva en la escudería italo-suiza de Fórmula 1, Alfa Romeo, con su papel competitivo en el certamen germano. En definitiva, Kubica ha hecho realidad su anhelo de permanecer activo en las carreras, más allá de la mencionada labor con la formación de la Categoría Reina, que ha dado el ok a la operación.
En esta contratación ha resultado fundamental el patrocinio que ha recibido de PKN Orlen, la compañía petrolera de su país que posibilitó su fugaz regreso a la Fórmula 1 con Williams y que ahora le acompañará en este nuevo desafío profesional. Kubica tomará la salida en las diez rondas del curso que arrancará el próximo 26 de abril en el Circuito de Zolder y finalizará seis meses después en Hockenheim, concretamente el 4 de octubre.
En definitiva, el conjunto ART Grand Prix retorna a la categoría después de participar durante dos temporadas en las que se anotó varias victorias y podios de la mano de Gary Paffet, Lucas Auer, Felix Rosenqvist y Esteban Ocon, antes de despedirse en 2016.