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Jean-Eric Vergne ha conseguido la victoria en el ePrix de Mónaco de Fórmula E, novena carrera de la temporada 2018/2019 de Fórmula E. El vigente campeón mundial y piloto de DS Techeetah ha liderado de principio a fin, estando perseguido por Oliver Rowland, Felipe Massa (primer podio del brasileño en la categoría en la prueba de casa de su equipo, Venturi) y Pascal Wehrlein.
Vergne salía desde la pole seguido por Wehrlein, Rowland, Massa y Sébastien Buemi en una salida limpia, donde los pilotos fueron conservadores en un circuito que muchos conocen bien – el trazado es la zona del puerto del mítico circuito urbano, conocido por todos los que han pasado por Fórmula 1. Todos los coches se mantuvieron en línea casi sin incidencias, si bien los primeros abandonos – Max Günther, Edoardo Mortara, Lucas di Grassi y Oliver Turvey – se produjeron uno detrás de otro. El de Günther provocó banderas amarillas que juntaron a los pilotos y, en la resalida, di Grassi se fue largo llegando a la chicane, siendo apretado y enviado directo contra la barrera.
Por delante, Vergne tenía la presión constante de Rowland, Massa y Wehrlein, quien perdió dos posiciones al pasarse de frenada en Santa Devota. Por detrás se producía una pelea con nombres como Sébastien Buemi, Antonio Félix da Costa, Sam Bird, Robin Frijns, Alex Sims o Mitch Evans, que ya se mostró rápido en clasificación con su Jaguar. Para los dos Virgin la carrera se vino abajo en las últimas vueltas: primero Frijns tuvo un accidente en la primera curva con Sims y rompió la rueda delantera izquierda mientras que Bird fue golpeado por detrás en la última vuelta, con la trasera derecha pinchada, perdió toda opción al Top 10.
Los cuatro primeros estuvieron peleando metro a metro hasta el final, pero mantuvieron sus posiciones con Vergne subiendo a lo más alto por delante de Rowland, Massa y Wehrlein. Buemi, Da Costa, Evans, Daniel Abt, André Lotterer y Alex Lynn completaron las posiciones de puntos.
