El COVID-19 continúa infectando a la Fórmula 1. Tras aplazar el Gran Premio de China, esta mañana los promotores del Gran Premio de Baréin han anunciado que la carrera se llevará como estaba previsto pero a puerta cerrada. Esta carrera será la primera en la historia de la Fórmula 1 a puerta cerrada.
Lo cierto es que Baréin ya anunció medidas excepcionales para el Gran Premio como el de prohibir reuniones públicas o, recientemente, parar la venta de entradas. Ahora, y con el fin de llevar a cabo el evento, han decidido vetar a los aficionados de la segunda carrera del mundial de Fórmula 1 con el objetivo de evitar la propagación del COVID-19 dentro del país.
“En consulta con nuestros socios internacionales y el Ministerio de Salud del Reino, Baréin ha tomado la decisión de celebrar el Gran Premio de este año como un evento exclusivo para participantes. Como nación anfitriona de la F1, el bienestar de los seguidores y los asistentes a la carrera es una responsabilidad tremenda. Dada la continua expansión de Covid-19 por el mundo, convocar un evento deportivo importante abierto al público y miles de viajeros internacionales interactuando con los aficionados locales no hubiese sido lo correcto en este momento. Para garantizar que ni el deporte ni su base de seguidores globales se vean afectados de manera indebida, el fin de semana de carreras en sí seguirá adelante como un evento televisado", han explicado los organizadores del Gran Premio en un comunicado.
A diferencia de MotoGP, la Fórmula 1 apenas ha visto alterado su calendario y, de momento, solo el Gran Premio de China ha sido aplazado. De hecho, la temporada arrancará la semana que viene en Albert Park y en principio el campeonato seguirá adelante.