Helmut Marko, asesor de la escudería Red Bull Racing, ha admitido que se equivocó cuando criticó el halo durante 2018. Este elemento estuvo inmerso en muchas polémicas desde que se implantó hace 4 temporadas, pero con el tiempo se ha demostrado que ha dado mucha más seguridad a la Formula 1 para proteger a los pilotos de graves incidentes como el que sufrió Alonso en Spa en 2018, o Grosjean en Bahréin la pasada temporada.
Este fin de semana hemos visto el claro ejemplo de por qué hay que tener el halo, y es que si no hubiese sido por ese elemento, Hamiton hubiera tenido más que unos pocos rasguños en su casco en el incidente con Verstappen, ya que el monoplaza del holandés pasó por encima del Mercedes apoyando su rueda trasera derecha en el halo y rozando la cabeza del heptacampeón. La acción fue sancionada por la FIA con 3 posiciones para Verstappen en Sochi.
Marko rectificó y admitió que desde el incidente de Grosjean, su perspectiva cambió. "Fui bastante escéptico cuando lo introdujeron. Tras ello, me veo obligado a admitir que el halo ha sido un factor decisivo para asegurar que las consecuencias de los accidentes sean más leves. Ya se vio en el accidente de Grosjean el año pasado". Si no fuese por el halo, pilotos como Ericsson en Monza, podrían haber sido mucho más duros, ya que el piloto apenas tuvo unos rasguños tras dar más de dos vueltas de campana con su Alfa Romeo tras pisar la hierba en la frenada de la curva 1.