El piloto mexicano de la escudería de Fórmula 1 Racing Point, Sergio ‘Checo’ Pérez, volverá a competir este fin de semana en el Gran Premio de España que se disputa del 14 al 16 de agosto en el Circuito de Barcelona.
Así lo ha confirmado su equipo en un comunicado público en el que ha informado del resultado negativo de un test por coronavirus al que se había sometido recientemente el corredor de Guadalajara.
De este modo se termina una pesadilla para el talentoso tapatío que arrancó hace un par de semanas antes del inicio del Gran Premio de Gran Bretaña disputado en el autódromo de Silverstone. 24 Horas antes de la cita inglesa (30 julio) se sometió a una prueba que determinó que estaba infectado por dicho agente patógeno.
Desde ese momento y cumpliendo con el protocolo sanitario establecido por la Fórmula 1, el deportista de Guadalajara permaneció en aislamiento. A pesar de esta medida, nueve días más tarde (8 agosto), previo al Gran Premio del 70 Aniversario, se le realizó otra prueba.
Pero el diagnóstico demostró que continuaba afectado por la infección, por lo que nuevamente fue reemplazado en su monoplaza por el alemán Nico Hulkenberg.
Por fortuna, como dice el refrán, a la tercera ha ido la vencida. Después de unas semanas muy duras en medio de los rumores de su salida del equipo por el presunto fichaje del Sebastian Vettel por Racing Point, Checo ha debido lidiar con un problema de salud y las dudas sobre su futuro laboral.
Tanto es así que algunos rumores llegaron a indicar que si no se había hecho pública la contratación del tetracampeón de Heppenheim para ocupar su asiento en la formación rosa, solo fue a una cuestión de sensibilidad ante el problema que atravesaba Pérez.
Sea como fuere, lo importante es que el corredor sudamericano se encuentra en perfecto estado y que ha superado la enfermedad sin haber percibido ningún síntoma de la misma.