Honda y Márquez, ¿en apuros para defender su corona en 2020?

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El binomio Marc Márquez-Honda ha sido imbatible en estos últimos años, consiguiendo nada menos que cuatro títulos de MotoGP de manera consecutiva, además de los dos conseguidos también ‘back to back’ en 2013 y 2014. La marca anunció la renovación del piloto de Cervera hasta 2024, muestra de la fe en el seis veces campeón del mundo de MotoGP – además de serlo de 125 y Moto2. Ahora bien, la pretemporada 2020 está siendo una bastante dura tanto para el piloto como para la marca.

Siempre hay que tener en cuenta el hecho de que en pretemporada, aunque se atisban algunos detalles de cada equipo, la realidad en pista dista mucho de lo que ocurre una vez llega la primera carrera del año. De los tiempos poco hay que fiarse en muchas ocasiones, con los equipos con diferentes programas, centrados en fiabilidad, tandas largas o test de aerodinámica.

Ahora bien, la lesión en el hombro de Márquez, de la cual tuvo que ser operado, ha sido el primer gran contratiempo, teniendo que hacer tanto el test de Sepang como el de Qatar en mitad de la recuperación, llegando a Malasia a un 60% de su capacidad según sus propias declaraciones. Un nervio dañado en el deltoides del hombro derecho es el responsable de todo ello, una pequeña secuela de la operación.

En diciembre afirmaba que le costaba realizar con el brazo izquierdo tareas simples como levantar un vaso de agua y se espera que esté al 100% para la primera carrera del año, a la cual el número 93 que a tantos ha hecho vibrar no faltará, formando equipo por primera vez en el equipo Repsol Honda con su hermano Alex Márquez, actual campeón de Moto2.

Ya en Sepang sufrió varias caídas durante los test, si bien salió ileso de todas ellas. En Qatar volvió a producirse esta situación durante la segunda jornada, una en la que además su Honda salió mal parada, acabando destrozada. Por suerte, Márquez volvió a salir ileso y al día siguiente estaba de nuevo a los mandos de la RC213V, pero lejos de los tiempos de Suzuki y Yamaha, mostrándose estos últimos especialmente fuertes con Fabio Quartararo y Maverick Viñales.

Por otro lado, durante los dos test de pretemporada la RC213V especificación 2020, que a priori usarían ambos hermanos Márquez este año, ha sido criticada por tener problemas de subviraje. El propio Márquez manifestó esto, a lo cual se unió el piloto del equipo LCR Cal Crutchlow. En tandas largas, las Honda estaban rodando hasta un segundo más lentas que las Suzuki o las Yamaha, las cuales prometen mucho este año tras los tiempos marcados por Quartararo o Viñales.

De hecho, tanto fue así que en el último día de test Márquez estuvo probando con varias motos, entre ellas una moto con especificación de 2019, una de las de LCR utilizada por el japonés Takaaki Nakagami. A base de rodar con diferentes especificaciones, en las dos últimas horas de los test de pretemporada Márquez encontró la clave y volvió a notar el feeling que llevaba buscando toda la pretemporada.

Por tanto, cierto es que estos meses no han sido los óptimos para Honda, mucho menos con su piloto estrella teniendo que recuperarse de la operación. Ahora bien, si las palabras del de Cervera reflejan la verdad, no hay motivo para pensar que estarán listos para pelear para el inicio de temporada, una en la que Yamaha y Suzuki están muy fuertes y tanto Ducati como KTM y Aprilia están acortando distancias con respecto a las marcas orientales.