Jack Miller e Iker Lecuona han sido operados con éxito de sus dolores provocados por el síndrome compartimental. Ambos pilotos ya habían manifestado su malestar en sus brazos derechos durante los dos grandes premios celebrados en el circuito de Losail. Este es un problema muy frecuente entre los pilotos, tanto que el australiano y el español ya lo habían sufrido en el pasado.
Miller, que solo pudo ser noveno en las dos primeras pruebas pese a partir como uno de los grandes aspirantes al título, ya explicó después de la carrera esta posibilidad. “Después del incidente con Mir, pude atacar y reducir la diferencia. Hice algunas de mis mejores vueltas y después de eso comencé a notar un bombeo en el brazo derecho, así que tendremos que mirarlo. Ya lo sufrí la semana pasada, así que no sé si es la pista, el viento o algo así, pero tenemos que averiguarlo. Probablemente nos ocuparemos de eso esta semana”, comentó en su página web tras la carrera.
Tras finalizar el GP, el #43 viajó a Barcelona para pasar revisión y tomar una decisión, que finalmente ha sido la de pasar por quirófano. La intervención ha ido a cargo del Doctor Xavier Mir, en el Hospital Universitario Dexeus. El de Ducati emepzará la recuperación de inmediato con la vista puesta en el GP de Portugal, en Portimao, que empieza el 16 de abril.
Su equipo, el Ducati Lenovo Team, ha emitido un comunicado con las palabras del piloto tras la intervención. “La operación ha sido breve y ha ido muy bien. No veo el momento de empezar la rehabilitación: faltan 10 días para el próximo Gran Premio en Portimao y si los plazos de recuperación van según lo previsto, podré estar disputando la carrera de Portugal aunque no esté al 100% de mi condición física. Quiero agradecer al Doctor Mir y a todo su equipo del Hospital Dexeus su disponibilidad y su trato”, ha declarado.
Por su parte, Iker Lecuona ya dejó entrever, tras la cita del pasado domingo, que debería someterse a la cirugía. “Tengo un bombeo en el brazo derecho. Ya me han operado dos veces, pero no sé por qué ha vuelto. Así que el viernes no di más de cuatro o cinco vueltas. Además, durante el fin de semana lo pasé mal porque pensé mucho en ello, me costó mucho mentalmente. No sabía si iba a ser capaz de terminar la carrera, noté el bombeo en el brazo y no podía manejar la moto al máximo. El rendimiento de mi brazo cayó, pero no hasta el límite”, explicó.
El piloto del equipo KTM Factory Tech3 ha sido intervenido en el Hospital IMED de Valencia por el Doctor Eduardo Sánchez Alepuz, el mismo que le había operado del síndrome compartimental en dos ocasiones. El valenciano se ha mostrado en redes sociales “muy contento” por como había ido y también tratará de llegar a la siguiente cita del Mundial de MotoGP.