A falta de RS, buenos son los ST. El nuevo Ford Focus carece de momento de una radical versión RS, pero eso no es problema para que los preparadores se pongan manos a la obra sobre el Focus, ya que el ST puede dar mucho de sí.
Los alemanes de Wolf Racing han indagado sobre cómo sacar más potencia de su motor EcoBoost sobrealimentado de cuatro cilindros y 2.0 litros. La cosa no parecía presentar demasiados problemas, así que han separado su oferta en tres fases para adaptarse a los gustos y bolsillos de cada uno.
En una primera fase un nuevo filtro de aire y una reprogramación de la centralita bastan para ganar 35 CV y poner al Focus en 285 CV y 441 Nm. ¿Quieres más? No hay problema, la segunda fase añade además un nuevo turbo que lleva al Focus hasta los 300 CV y 451 Nm.
Ambas están bien para conseguir un coche con algo más de chicha, pero si se quiere dar el salto de verdad hay que pasar a la tercera fase. Aquí además de todo lo anterior se suma una nueva línea de escape que lleva al compacto hasta los 370 CV y 554 Nm. Esto ya si es otra cosa.
Tanta potencia no podía venir sola y por eso en Wolf Racing han pensado que sería mejor ponerle al Focus unos frenos más eficaces y una nueva suspensión que deja la caja más cerca del suelo, 50 mm delante y 40 mm detrás.
Estéticamente no se han complicado la vida y con unos nuevos bajos que se añaden a los elementos originales, juegos de llantas y colas de escape, es suficiente. Lo importante queda debajo.