El uno de octubre se correrá el Gran Premio de Malasia 2017 de Fórmula 1, que será la décimo-quinta prueba del campeonato de Fórmula 1. Sin embargo, este gran premio será el último en correrse en Malasia por el momento ya que se confirmó meses atrás que este gran premio no se va a incluir en el calendario para la temporada 2018.
El motivo es sobre todo el económico, pues durante la era de Bernie Ecclestone la cuota que se le ha ido pidiendo a Sepang (así como a otros circuitos) ha ido aumentando a cifras astronómicas de manera anual, hasta el punto de no rentarle. Por ello, a principios de este año la organización del circuito comunicó que esta edición sería la última - al menos hasta que Liberty Media decida darle un contrato convincente en el futuro.
Aunque se trata de las primeras creaciones del diseñador Hermann Tilke, Sepang goza de una buena reputación, además de ser uno de los eventos más duros por las altas temperaturas y la humedad, que hace que los pilotos acaben agotados. De hecho llegan a perder hasta tres litros de agua durante la carrera, un cinco por ciento de su masa corporal total.
Sepang llegó por primera vez al calendario a finales de 1999 en mitad de una pelea por el título entre Mika Häkkinen y Eddie Irvine, pero se recuerda sobre todo por el retorno de Michael Schumacher meses después de haberse fracturado las dos piernas en Silverstone. En esta ocasión Schumacher hizo de escudero de Irvine y este lideró un doblete que llevaba la pelea hasta el final de temporada en Suzuka. Poco después los dos Ferrari fueron descalificados por llevar unos faldones más largos de lo que indicaba la normativa, pero la escudería italiana apeló y recuperó ese primer y segundo puesto.