Valtteri Bottas se vio afectado en el Gran Premio de Bahréin por la rotura de un generador del equipo Mercedes, lo cual afectó a la presión de sus neumáticos. Esto le hizo tener un ritmo menor del habitual y, pese a que partía desde la pole position, el finés no pudo aprovecharlo, acabando la carrera en tercera posición.
Este generador, que se rompió en la parrilla de salida antes de comenzar la carrera, hizo que las presiones de los Pirelli de Bottas fueran las incorrectas. El propio jefe del equipo Mercedes Toto Wolff comentó este problema, según se recoge en el medio británico Motorsport.com.
“No sé cuál era la cantidad exacta, pero la diferencia era de más de un PSI. Para entonces todo el mundo quiere estar en el mínimo de presión de los Pirelli y eso ya era demasiado alto. Más de eso es peor. El efecto era como si se sobrecalentase, era como si tuviera marbles en los neumáticos traseros. No funcionaban como deberían. Se sobrecalentaban desde la superficie, de una parte más pequeña del neumático – el equilibrio se limita y la tracción es muy poca”, declaró Bottas.