Desde 2013 no se veía una victoria de Kimi Raikkonen en la Fórmula 1, más de 4 años y medio después el finlandés se puso el mono de trabajo para aprovechar una oportunidad que no tendría dos veces. El de Ferrari demostró ser superior a Hamilton durante la carrera y fue capaz de aguantar las embestidas del siempre agresivo Max Verstappen.
"No he tenido problemas con ello. Sí los ha habido para otros. Si [esta victoria] llega, bien, si no, no cambia mi vida para nada. Estoy feliz porque estamos aquí para intentar ganar. La gran diferencia es cómo te ve la gente. Obviamente, estoy feliz. He demostrado que había gente equivocada. Estoy feliz por el equipo después de varias carreras duras".
"Creo que la gente no entiende que estoy feliz a donde voy. He tenido mi periodo en Ferrari, gané el campeonato con ellos y muchas carreras. Yo, como piloto, quiero diferentes desafíos. Quiero cosas diferentes. No me ha decepcionado la decisión. Lo único en lo que estaba interesado era saber qué iba a pasar. El resto, he estado en la F1 lo suficiente para saber que no importa si tienes contrato o no, las cosas pasan por diferentes razones".
