El jovencísimo piloto español sorprendió a todos en Montmeló con su actuación, con tan solo 16 años y en su segunda carrera en Moto3 fue capaz de alcanzar el podio. Pero el podio del piloto sevillano no fue fruto de la suerte o regalo del destino, David tuvo que pelear mano a mano con los mejores en el grupo de cabeza. Tomó la salida desde la vigésima posición, pero hacia la vuelta 12 llegó a liderar el grupo. Sin embargo, Izan se mostró intratable en su escapada por la victoria. El del BOÉ Team se quedó batallando con experimentados como Suzuki y Sergio García.
"No esperaba estar tan arriba en la carrera. No esperaba estar en el podio aquí, eso es simplemente increíble. Esto es increíble para mí. He subido al podio en una carrera que no me esperaba. Salí por la mañana con el objetivo de intentar pelear todo lo posible y finalmente terminó segundo en uno de los Grandes Premios de casa, estoy muy contento. Ahora quiero tomar las cosas paso a paso. No me importan los resultados en las próximas carreras. Será importante poder seguir el ritmo de los pilotos de delante hasta el final de la carrera, ese es mi objetivo".
La adaptación a la moto, a la categoría y poder pelear de tú a tú con los rivales más fuertes de la parrilla será el objetivo del 44. Parece que los números y los resultados no van a ocupar demasiado tiempo en su mente. Es bastante joven, pero ha aterrizado en la familia del motociclismo de MotoGP con las cosas más que claras. Ha llegado con fuerza y ahora toca seguir trabajando para mantenerse al mejor nivel.