El circuito de Paul Ricard contará con dos zonas de DRS a lo largo de su trazado para su regreso a la Fórmula 1 después de casi 20 años de ausencia. Se trata de uno de los pocos circuitos del calendario que permite la colocación de dos zonas de DRS con sus correspondientes puntos de activación, aprovechando la naturaleza del circuito – se concibió en un principio como un circuito-autopista para competir.
Paul Ricard cuenta con diversas combinaciones de trazado ya que desde 1999, que fue reconstruido como circuito de test, ha sido remodelado por completo en todo lo que no es el asfalto en sí (lo que se conoce como High Tech Track Test). Para el retorno a la categoría reina se ha utilizado una configuración parecida a la que se utilizaba a finales de los 80, un poco más larga en la primera mitad que la configuración utilizada en el Mundial de Turismos y con la chicane que corta en dos la recta del Mistral – esto hace que los motores no estén al límite de vueltas durante tanto tiempo, lo cual puede alargar su vida útil.
La primera de las dos zonas de DRS se encontrará a lo largo de la recta de meta mientras que la segunda se ubicará en la primera mitad de la recta del Mistral, antes de la chicane. En lo que a los puntos de activación se refiere, el primero estará en la penúltima curva mientras que el segundo estará entre las curvas 6 y 7, que preceden a la gran recta que tiempo atrás llegaba a medir más de un kilómetro y medio.