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La FIA ha revelado en estos días los conceptos en los que está trabajando en el borrador para lo que será la normativa de Fórmula 1 para 2021, en el que se quieren trabajar muchos aspectos para aumentar la competitividad en pista. Entre los aspectos principales se encuentran dos: el retorno del efecto suelo y la reducción de la influencia aerodinámica en el comportamiento del monoplaza. Ahora bien, esta normativa ha de ser ratificada y no se espera que ocurra hasta finales de octubre en la reunión del Consejo Mundial de la FIA.
Durante años, la evolución de la tecnología y la aerodinámica ha tenido muchos efectos positivos en el rendimiento de los coches de Fórmula 1, pero también negativos para el espectáculo. La cuestión de los adelantamientos en pista es uno de esos principales aspectos negativos, pues las turbulencias creadas por la aerodinámica actual crea un aire sucio en el cual el coche perseguidor pierde mucho agarre, por lo que se ha tenido que recurrir a medidas como el DRS o la degradación ‘programada’ de los neumáticos Pirelli, algo basado en lo que se vivió en el Gran Premio de Canadá de 2010.
El efecto suelo es una invención que Lotus aplicó a la Fórmula 1 en la década de los setenta con coches como el 79, uno de los más dominantes en la historia de la categoría reina – esto sería prohibido en la década de los ochenta, en los albores de la era turbo. Gracias al uso del efecto Venturi en el fondo del coche se conseguía una gran cantidad de agarre mecánico, pero desde su prohibición los Fórmula 1 han utilizado fondos planos, que terminaba en el difusor trasero al final del chasis.
Para 2021, lo que se busca es simplificar elementos aerodinámicos complejos tanto en los alerones como en el bargeboard, además de un alerón delantero que sea menos sensible a las turbulencias. El mayor cambio se verá bajo el coche con túneles Venturi que funcionen como un doble difusor que será el origen de la mayor parte del agarre del monoplaza. También se modificará el comportamiento de los neumáticos para que sea posible atacar en pista en vez de gestión continua.
En el alerón delantero también habrá pequeños deflectores que desvíen el aire de los neumáticos delanteros para facilitar así el poder seguir a otro monoplaza. Si los Fórmula 1 actuales pierden un 45% de su agarre cuando ruedan a una distancia de dos coches de largo del que le precede, con este diseño las simulaciones estimas una pérdida de tan solo entre un 5% y un 10% según el medio Autosport.
Aún hay que trabajar varias áreas, pues Nicolas Tombazis, jefe de asuntos técnicos de monoplazas de la FIA, afirma que aún no están contentos con este concepto del alerón delantero ni en el apartado aerodinámico ni en el estético. Ahora bien, todas estas ideas han de ser aprobadas en consenso por todos los equipos de la Fórmula 1, algo que se quiere conseguir de cara a mediados de septiembre para después ratificarlo en el Consejo Mundial de la FIA.