Después del dominio atronador que tuvo Álvaro Bautista en las temporadas 2021 y 2022, en las que arrasó completamente la categoría de Superbikes dejando al resto de sus rivales de la parrilla con ni la más mínima opción de optar a luchar por el campeonato, desde la organización se adoptó una nueva reglamentación para evitar que el veterano piloto tuviera tanta ventaja respecto al resto.
La forma de la que se planteó desde la cumbre de SBK para igualar el rendimiento en la parrilla fue la de poner un mínimo de peso en el conjunto del peso corporal del piloto con el mono puesto. Este límite se estableció a principios de 2024 y se delimitó en 80kg, cosa que no fue de gran importancia para la mayoría de los participantes, pero si para Álvaro, que, debido a su baja estatura y a su menor corpulencia en comparación al resto, tuvo que instalar desde principio de temporada una pieza en forma de lastre en su moto para cumplir con lo establecido.
Esto ha reducido muy notablemente la eficacia del estilo de su pilotaje, muy ágil y dinámico encima de su Ducati. Con una moto mucho más pesada, se ha visto gravemente impactado su perfil, ya que no le permite tumbar y cambiar de dirección tan rápido, perdiendo así sus hechos característicos que le permitían ganar tiempo respecto a los demás en las curvas, sobre todo, pero también a la hora de adelantar en pista. Un ejemplo claro de que perjudica a Bautista es el hecho de que haya sido el piloto con más caídas de Superbikes en todo 2024.
Se especuló con que esta medida se revocara para la temporada 2025, pero finalmente se mantendrá, y Álvaro deberá volver a batallar de lo lindo con su moto para lograr estar lo más delante posible en la clasificación a final de año.