La promesa australiana ha ganado tres títulos consecutivos en los últimos años y ha tenido grandes actuaciones en pista para merecer un asiento en Fórmula 1, aunque su llegada no tendrá lugar en 2022 debido a la falta de oportunidades. En cambio, Guanyu Zhou, tercero en el campeonato de F2, sí dará el salto de la mano de Alfa Romeo.
A pesar de no tener un volante a su disposición, Oscar desempeñará su papel de piloto de pruebas en Alpine, con el fin aprender lo máximo posible del nuevo monoplaza francés y, además, trabajará junto a los dos pilotos y los ingenieros para continuar con su proceso de aprendizaje y así estar bien preparado cuando llegue su momento.
"No pienso en que sea un año perdido, me hubiese encantado estar en la parrilla, pero hay mucho que puedo hacer el próximo año. Las principales partes de mi rol es aprender todo lo que pueda de Fernando y Esteban, escuchar cómo va el desarrollo del coche, todo mi trabajo en el simulador y será una parte importante", ha concluido Piastri en palabras para Motorsport.