La semana pasada tuvo lugar la presentación del nuevo equipo que alineará Renault Sport F1 Team la próxima temporada en su vuelta a la categoría reina del automovilismo. Durante la ceremonia, el director de operaciones del equipo francés, Rémi Taffin, aseguró al diario Marca que el objetivo es luchar por el campeonato en 2018 y, entre tanto, desarrollar el monoplaza para hacerlo cada vez más competitivo. Las mejoras se centrarán, sobretodo, en el motor. "Este invierno hemos solucionado algunos de los problemas que se presentaron la temporada pasada con la premisa de tener un motor más fiable", afirmó Taffin.
El Gran Premio de Australia, primera prueba del Mundial de F1, será el escenario en el que Renault ponga en práctica la primera de las dos evoluciones que tiene previstas hacer durante este año en sus unidades de potencia. "Podría decir que vamos a ganar alrededor de 50 CV, pero una cosa es comprobar ese incremento en el banco de potencia y otra comprobarlo en la pista", explicó el director de operaciones galo.
A finales del presente mes comprobaremos en los test de Barcelona dónde está el nuevo RS16 con respecto a los monoplazas de los demás equipos y con quién podrá pelear la próxima campaña.