Max Verstappen, todo y no tener el mejor coche ni de lejos durante un gran tramo de la temporada, ha conseguido llevarse el mundial de pilotos por cuarta ocasión consecutiva y ya es tetracampeón de Formula 1.
Su mayor rival en esta temporada, el británico de McLaren Lando Norris, no ha podido llegar a incomodarle realmente todo y tener durante un aparte de la temporada un coche infinitamente superior al de Red Bull. Max ha conseguido incluso en los momentos difíciles y en los que se ha visto contra las cuerdas seguir superando a su rival y seguir hundiendo la moral de sus competidores, que se han visto inferiores y han vuelto claudicar delante del rey neerlandés.
Consciente de que ha conseguido revalidar título con un coche no preparado para ello, el número 1 no tiene dudas de que lo habría hecho aún de forma más clara con un coche que ha sido regularmente superior al suyo, o en este caso dos, el McLaren y el Ferrari.