Jack Miller, favorito de la afición local en el Gran Premio de Australia de MotoGP, ha expresado su optimismo de cara a la carrera de este fin de semana. El piloto australiano considera que las características del circuito de Phillip Island, junto con las complicadas previsiones meteorológicas, podrían abrir la puerta a resultados inesperados. "Creo que todo es posible", comentó Miller este jueves, destacando la naturaleza rápida del trazado y el impacto que tiene la habilidad de los pilotos en lugar de la tecnología de las motos. "Es una de esas pistas donde, incluso si tienes algún pequeño problema, puedes enmascararlo", añadió.
Pecco Bagnaia, el vigente campeón del mundo, compartió esta visión y admitió que el circuito australiano podría neutralizar la ventaja habitual de las Ducati. "Aquí la moto marca menos la diferencia, porque es muy rápido y es más difícil abrir hueco", explicó Bagnaia, anticipando una carrera más cerrada.
A pesar de las previsiones de lluvia, frío y viento, Miller ve estas condiciones como una oportunidad para sorprender. "Cuanto menos tiempo esté la pista seca, mejor para mí", aseguró el piloto de KTM, que ha tenido dificultades para progresar desde la FP1 en varias carreras esta temporada. "Esperemos tener un gran premio sólido", añadió, con la esperanza de capitalizar su velocidad en condiciones complicadas.
Aunque ha tenido una campaña difícil con su KTM, Miller destacó el buen trabajo de sus compañeros Pedro Acosta y Brad Binder, quienes han liderado a la marca austriaca en varias ocasiones. "No puedo ocultar que he tenido mis problemas", admitió, pero elogió el esfuerzo de su equipo por mantener la competitividad los fines de semana. Con las condiciones climáticas a su favor, Miller espera dar la sorpresa en casa y conseguir un buen resultado en Phillip Island.
