Joan Mir ha pasado de ser campeón del mundo con Suzuki a estar a 67 puntos de Fabio Quartararo sin casi tener opciones de disputar el título esta temporada. El piloto de Suzuki tiene contrato hasta 2022, donde quedaría libre para firmar por cualquier otra escudería que estuviera interesado en contratar al joven piloto mallorquín. Mir lleva toda la temporada con declaraciones contundentes de lo que piensa que tendría que hacer su escudería para volver a pelear por el título de cara a la próxima temporada y ya ha insinuado en diferentes ocasiones que discrepa de muchas decisiones de las que se están tomando hasta la fecha.
Una de las reclamaciones de Mir, era la creación de un equipo satélite para que Suzuki tuviera dos pilotos más que aportaran información al equipo, pero con la salida de Davide Brivio hacia la Formula 1, el proyecto fue parado. "Sería de gran ayuda tener un equipo satélite. A veces nos falta un poco de información con solo dos pilotos, y si uno no está rindiendo bien solo tienes una buena información. Así que eso sería una gran ayuda y contribuiría a que Suzuki subiera el nivel".
De hecho otra de las quejas de Mir es la substitución de Brivio, quién era perfecto para la harmonía entre orientales y occidentales en el mismo box. Necesitamos una persona seria, que cree armonía en el equipo y entre japoneses y europeos. Y no es fácil encontrarlo".
De cara a final de temporada, el objetivo de Joan Mir es intentar arrebatarle la segunda posición del Mundial de MotoGP a 'Pecco' Bagnaia, quien tiene 19 puntos más que él a falta de 5 carreras. El piloto de Suzuki sabe que va a ser complicado, sobretodo con una moto que es inferior a la de Ducati, algo que influirá en su decisión a cerca de su renovación en 2022. Me gustaría quedarme, pero me gusta ganar y eso es lo más importante. Será muy importante ver cómo terminamos el año y las ganas que tienen de volver a ganar. Será la clave para decidir si quedarme o marcharme".